El otro día se presentó cont.ar una plataforma de VOD (Video On Demand) para ver las producciones y señales agrupadas en el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos.

Rápidamente un grupo de Trabajadores de la Televisión Digital Abierta hizo notar que esa plataforma ya existía con otro nombre: Contenidos Digitales Argentinos. La que a mediados de 2016 fue dada de baja para su re-diseño.

Hasta aquí nada extraño de no ser porque dos años después la nueva plataforma re-acondicionada presenta muy pocas novedades debido a la escasa o nula producción del período y un menú de los mismos materiales re-editados.

Todos quienes hemos trabajado en una señal hemos recauchutado material con nuevos diseños alguna vez. En el cable y en la tele vemos volver una y otra vez los mismos separadores esperando un cambio tecnológico significativo que los envíe definitivamente al conteiner de la historia. Sin embargo, esta tarea generalmente se realiza sobre la nueva gráfica o locución, cambiando los logotipos de las placas del final y el inicio por unas nuevas o agregando aún otras más a las ya existentes.

Lo sintomático esta vez es que el refashioning tiene un objetivo más político que estético: eliminar cualquier huella de la relación del Estado, las Universidades y las Empresas en un círculo virtuoso para la Producción Audiovisual de Calidad.

[youtube https://www.youtube.com/watch?v=tjKBbLMhhZQ?rel=0&showinfo=0&w=560&h=315]

Este fragmento de los títulos finales del episodio 6 de la serie Cromo (Lucía Puenzo, 2015) es el que tomamos como caso testigo para este análisis. En el televisor pueden ver la versión original del capitulo emitida al aire por la señal TecTV el viernes 18 de Mayo de 2018 mientras que en la notebook pueden ver sincronizada la reproducción del mismo episodio por el streaming de cont.ar.

Así puede apreciarse en tiempo de reproducción como a partir de la placa de títulos de autoridades se suprimen a su vez los agradecimientos y los créditos de la TDA (Televisión Digital Abierta) y BACUA (Banco Audiovisual de Contenidos Audiovisuales Argentinos).

Luego de estas cuatro placas viene una particularmente extraña que perdura en ambas versiones y es la de cuatro empresas del ámbito del alquiler de equipos y servicios audiovisuales (Alfavisión, Viditec, etc); para luego ser suprimida la placa siguiente que agradece a Parques Nacionales y el Ministerio de Turismo junto a la cadena de hoteles panamericano.

CROMO-APN

A partir de aquí continúan las mismas placas en ambas versiones: una con diez logos pequeños de empresas privadas y otra con el sitio web de la productora de Puenzo. Para finalmente ser reemplazadas las marcas antiguas de Presidencia de la Nación, CDA y BACUA por las del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos actuales (posiblemente esto último lo esperado y normalmente realizable en estos caso).

Pero, ¿Por qué quitar las placas internas de los títulos finales? o más inquietante aún ¿Por qué dejar unas si y otras no?. La respuesta parece ser sencilla: la tarea meticulosa de edición se encuentra realizada ante la consigna de borrar las huellas del trabajo conjunto entre el Estado, las Universidades Nacionales Públicas y las empresas privadas.

Expresado esto en el exacto gesto de omitir las menciones a las Autoridades Nacionales, del Ministerio de Planificación Federal, del Ministerio de Cultura y del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales; gesto que se presumiría solamente como acto infantil de oposición. Pero no es solo eso, es mucho más profundo y perverso: se suprimen también las placas donde se agradece a dos laboratorios científicos de la Universidad de Buenos Aires que colaboraron con la casa productora, se omite al Ministerio de Turismo y la Administración de Parques Nacionales junto con una cadena hotelera y se suprime el agradecimiento a los sindicatos SATSAID (Sindicato Argentino de Televisión) y SUTEP y a las Sociedades Gestoras de Derechos SADAIC y ARGENTORES. Para dejar un continuo limpio en el que los títulos finales del episodio 6 de Cromo son los de cualquier producción privada y sus compromisos comerciales, sin obrar en su producción ninguna relación entre el Estado y el Privado; anulando la imagen de que es posible hacer una televisión de calidad argentina donde poner en funcionamiento recursos humanos y dinero públicos y privados en pos de un proyecto audiovisual de país.

CROMO es un producto audiovisual de calidad nacido de la colaboración estrecha del Privado como potencia creadora, del Estado como fomento y distribución de bienes culturales nacionales y de las Universidades desde la capacidad intelectual y humana de abordar temas y realizarlos.

Definitivamente la versión que se muestra en cont.ar no es la original.

 

Publicado por obsoleta

Conecto viejas tecnologías de video con otras nuevas.